jueves, 22 de marzo de 2012

Motivación - Conversión de emociones.

sábado, 17 de marzo de 2012

Sinceramente Tuyo


No escojas solo una parte
tomame como me doy
entero y tal como soy
No vayas a equivocarte
Soy sinceramente tuyo
pero no quiero mi amor
ir por tu vida de visita
vestido para la ocasion
Preferiria con el tiempo
reconocerme sin rubor
Cuentale a tu corazon
que existe siempre una razon
escondida en cada gesto
del derechoy del reves
uno siempre es lo que es
y anda siempre con lo puesto
Nunca es triste la verdad
lo que no tiene es remedio
Y no es prudente ir camuflado
eternamente por ahi
ni por estar junto a ti
ni para ir a ningun lado
No me pidas que no piense
en voz alta por mi bien
Ni que me suba a un taburete
si quieres probare a crecer
Cuentale a tu corazon
que existe siempre una razon
escondida en cada gesto
Del derecho y del reves
uno es siempre lo que es
y anda siempre con lo puesto
Nunca es triste la verdad
lo que no tiene es remedio

miércoles, 14 de marzo de 2012

Gente Tóxica: Cómo protegerse de los 7 tipos de vampiros emocionales

Los vampiros emocionales
Por Roberto Palomino 

 
toxic_people.jpgLos vampiros emocionales
Por Roberto Palomino


Vampiros emocionales. De acuerdo, el término es bastante dramático, y algunos dirían que hasta excesivo… pero después de un encuentro —por breve que sea— con uno de estos individuos, todos estamos de acuerdo en que es el único que realmente los describe. Después de tratarlos, nos sentimos como si una especie de `Drácula síquico’ nos hubiera drenado emocionalmente, dejándonos deprimidos, sin energía, con el ánimo apagado.

Todos conocemos por lo menos uno. ¿No lo crees? Haz una prueba sencilla: ¿Existe alguien que evitas o rehúyes, sea en persona o por teléfono? ¿A quién te cuesta mucho trabajo devolverle una llamada, porque la sola idea de hablar con él o ella te cansa? Después de compartir con cierta persona, por `agradable’ que haya sido el encuentro, ¿te quedas tensa, molesta o agotada… y muchas veces ni siquiera entiendes por qué?

Si has respondido que sí a cualquiera de estas preguntas, no lo dudes: estás lidiando con un vampiro emocional. Lo insidioso de este problema, es que puede ser un desconocido… o un ser querido: el padre, el esposo o la mejor amiga. De igual manera, la relación puede ser cercana o distante; la persona agradable o desagradable… pero el efecto que tiene sobre ti siempre es tóxico.

Existen dos clases de vampiros emocionales —ambos igualmente tóxicos— que debes aprender a reconocer.

Amenaza invisible

El primero es el vampiro invisible. Y es que muchas veces, el comportamiento de estas personas no es abiertamente tóxico, por decirlo de esta forma. Por lo tanto, es difícil reconocerlas y `neutralizarlas’. Después de todo, son pocos los que no captan cuando alguien se comporta de una manera grosera o desagradable con ellos, o cuando trata de ofenderlos de acción o de palabra. Pero dicen que no hay peor contrincante que un enemigo invisible, y es verdad.

Muchos vampiros emocionales operan `por debajo del radar’. En otras palabras: su comportamiento tóxico no es evidente; este se oculta detrás de una actitud o unas palabras inocentes. Esto se debe a que ellos envían `mensajes dobles’, que es el arte de decir una cosa aparentemente inocua, e insinuar otra muy diferente.

Por ejemplo: `Qué bien te queda ese vestido’, dice tu `mejor amiga’… antes de agregar: `Incluso te hace cintura’. `Qué bien te ves… para tu edad’. Este tipo de comentario también se conoce como `el dulce envenenado’, porque, detrás del elogio, siempre hay una crítica implícita.

El vampiro solapado también suele recurrir al humor como una forma de atacarte sin dar la cara ni sufrir las consecuencias. La regla que funciona aquí es la siguiente: si él o ella bromean con que tienes sobrepeso o no encuentras pareja… no debes ofenderte, porque se trata de una broma.

Cuando Susana, un ama de casa de 32 años, le pidió a su suegro que no le hiciera más chistes sobre su peso, él no solo le hizo sentir que ella era una acomplejada sin el mínimo sentido del humor… `sino que acabó dándome cátedra sobre la importancia de quererme tal como soy. O sea, que el problema acabé siendo yo’, contó, indignada.

El lenguaje corporal también es una estrategia muy común de los vampiros emocionales. Te dicen `Respeto tu decisión’… con una sonrisa cínica en la cara; juran que te aprecian… con los brazos cruzados; te piden que les creas… y desvían la mirada (a veces el gesto es tan sutil, lo que los sicólogos llaman una microexpresión, que no lo captas a nivel consciente; pero sientes que algo simplemente no `cuadra’). Ellos te dicen una cosa, pero tú percibes todo lo contrario. Esta discordancia crea una confusión interior que, a la larga, te drena.

Vale aclarar que, muchas veces, el vampiro emocional no opera a nivel consciente; no sabe el efecto que tiene en los demás. Simplemente, es su forma de ser. Como también ocurre con el segundo ejemplar.

Vampiro a la vista…

La segunda clase de vampiro emocional es más fácil de detectar, pero no menos difícil de sobrellevar. Estos son algunos de los ejemplares más comunes, de acuerdo con las teorías de las expertas en relaciones interpersonales Cheryl Richardson, autora de Take Time for Your Life (Toma tiempo para tu vida) y la doctora Lillian Glass, autora de Toxic People (Gente tóxica).

1. Los negativos.
Ven el mundo a través de lentes oscuros. Y a ti te toca la ardua tarea de elevarles el ánimo, lo cual es como subir una piedra montaña arriba. `Tengo que buscar trabajo’, dice ella. `Ahora hay muchas oportunidades en tu campo’, le dices tú. `Sí, pero a mi edad…’, apunta ella. `La experiencia vale de mucho’, señalas. `Ay, pero las empresas prefieren personas jóvenes…’. Llega el momento en que tú, que tratabas de animarla, acabas más deprimida que ella, y temiendo por tu futuro laboral.

2. Los quejosos.
Se pasan la vida lamentándose de lo mismo —y `lo mismo’ puede ser la pareja, el empleo, los hijos, la economía—, pero nada hacen para cambiar la situación. En realidad, esta persona solo quiere quejarse, pues esto le produce un alivio momentáneo. ¿Tú? Después de una sesión maratónica de quejas, en la que al final nada se resuelve, acabas drenada.

3. Los criticones.
Ponen objeción a todo lo que dices y haces; para ellos, tú nunca das la talla. Por supuesto, insisten en que las críticas son `por tu bien’. Pero la realidad es que te dejan por el piso. Por regla general, estas personas le encuentran un defecto a todo: la película, la cena, el servicio en el restaurante… ¡Son irritantes y ¡agotadoras!

4. Los belicosos.
Cualquier incidente, por mínimo que sea, provoca en ellos una reacción agresiva. Sientes que debes vigilar lo que dices o haces, para no encender la pólvora, porque cuando estallan, ¡arde Troya! Esto apaga tu espíritu.

5. Los débiles e indefensos.
Constantemente necesitan que hables por ellos, los defiendas, los apoyes, los protejas… porque ellos, pobrecitos, no saben valerse por sí mismos. Pero, sin duda, llevar todo ese peso sobre tus espaldas te quita hasta la última gota de energía. ¿Ellos? Tranquilos y felices, porque no tienen que hacerse responsables por sí mismos. En este grupo hay que incluir a los `poca cosa’ que practican la agresión pasiva; esos que, después de un desacuerdo, te juran que no te guardan rencor… pero luego se olvidan, por ejemplo, de pasar por ti a la hora acordada. Es su forma indirecta de castigarte.

6. Los sarcásticos.
Sus comentarios —crueles, burlones, en fin: sarcásticos— pueden resultar chistosos, pero cuando ese humor negro siempre va dirigido a ti, acaba por minar tu espíritu. Después de una sesión de ironías y comentarios ácidos, te sientes dolida e insultada.. Su humor hiriente es tóxico para el alma, porque siempre golpea donde más duele.

7. Los catastróficos.
Siempre están hablando de huracanes, enfermedades, muertes, desgracias y colapsos económicos. Para ellos, la vida es un peligro inminente, y si algo va a ocurrir, seguramente será muy malo. Cinco minutos con ellos acaban con tus nervios.

Un peligro real

Daniel Goleman, autor del best seller internacional La inteligencia emocional, nos asegura que el efecto que nos causan estas personas va más allá de una molestia momentánea. De acuerdo con su último libro, Social Intelligence (Inteligencia social), nuestros intercambios diarios con la pareja, los hijos, el jefe y aun con extraños, moldean la estructura física de nuestro cerebro a nivel celular; esto, a su vez, afecta todas las células del cuerpo, efectuando cambios incluso a nivel genético.

En otras palabras: nuestra reacción ante los demás tiene un impacto biológico en nuestro organismo, ya que durante un contacto social segregamos hormonas que afectan desde nuestro corazón hasta nuestro sistema inmunológico. Según Goleman, las buenas relaciones son como una vitamina; las malas, como un veneno. Y no solo eso: las emociones ajenas son contagiosas, lo mismo que un catarro. ¿Entiendes ahora por qué es tan importante neutralizar a los vampiros emocionales?

Los pasos claves

1. Reconocerlos. Determina en qué categoría cae esa persona que te deja drenada anímicamente. De esta manera nunca te toma desprevenida, pues ya sabes cómo opera.

2. Mantener el balance interior. Para evitar el contagio, muchas veces entender por qué esa persona tiene ese efecto sobre ti, te ayuda a protegerte de su influencia negativa. Cuando sabes que es ella, y no tú, la que tiene un problema (porque es negativa, belicosa, catastrófica, etc.), puedes mantener una distancia emocional que te permite observar su comportamiento `desde afuera’, sin que te afecte.

3. Alejarte. Si esta persona no es esencial en tu vida, puedes diluir la relación. Muchas veces la costumbre nos `ata’ a amistades tóxicas.

4. Sanar la relación. Si la relación es importante para ti, Cheryl Richardson aconseja que le dejes saber a esa persona de qué manera te está afectando. No se trata de enfrentarla, herirla ni atacarla. En el momento oportuno, cuando ambas estén en buenos términos, debes llamarla aparte y dejarle saber que, justamente porque la quieres y valoras la relación, tienes algo que decirle. `Cuando haces/dices tal cosa, yo me siento tensa/triste/ansiosa/ofendida. Te pido que no lo hagas más’. Esto puede iniciar un diálogo muy sano para las dos.

Roberto Palomino

sábado, 10 de marzo de 2012

Les Luthiers - El Teorema de Thales

El billete de 100 dolares

Un conferencista muy reconocido comienza su seminario teniendo
muy en alto un billete de 100 dólares.
Él le pregunta a la gente:
"¿Quien quisiera tener este billete?"
Las manos comienzan a levantarse, entonces dice:
"Voy a darle este billete de 100 dólares a alguno de ustedes,
pero antes déjenme hacer algo con él."
El arruga entonces el billete con fuerza y pregunta:
"¿Aún quieren éste billete?"
Las manos continúan levantadas.
"Bueno, de acuerdo, pero ¿que pasaría si hago esto?"
El bota el billete arrugado al piso y salta con los pies
juntos encima, espichándolo lo más posible y cubriéndolo
con el polvo del piso.
Enseguida pregunta:
"¿Quien quiere todavía éste billete?"
¡Evidentemente las manos continúan levantadas!
"Amigos míos, acaban de aprender una lección... poco importa
lo que yo haga con este billete, siguen queriéndolo porque
su valor no ha cambiado, cuesta todavía 100 dólares."
"Piensen ahora en ustedes, en su vida. Muchas veces
se sentirán arrugados, rechazados, ensuciados
por la gente o por los acontecimientos."
Tendrán la impresión de no valer nada ¡pero en realidad su
valor no habrá cambiado a los ojos de la gente que los ama!
El valor de una persona no depende de lo que uno ha hecho
o no, ustedes podrán todos los días volver a empezar y
lograr sus objetivos porque su valor intrínseco está siempre
intacto.

"El arquero es un modelo para el sabio. Cuando le ha fallado
al blanco, busca la causa en sí mismo."
- Confucio
"Adopta la divisa del reloj de sol: yo no marco sino las
horas asoleadas."
- O.S. Marden





P.D.: Sólo por hoy elige pensamientos y emociones positivas.
Notarás la diferencia.

lunes, 5 de marzo de 2012

Poemas.



 "Cuando veo a un adulto sobre una bicicleta, aún creo que hay esperanza para la humanidad." H. G. Wells

"Si alguien va cuesta abajo, no necesita motivación para ir más rápido.  Lo que necesita es educación para cambiar su rumbo." Jim Rohn





EL QUE CUENTA
No es el crítico quien cuenta, ni el que señala con el dedo al hombre fuerte en el momento que tropieza, o el que indica en qué cuestiones el que hace las cosas hubiera podido hacerlas mejor. El mérito recae exclusivamente en el hombre que se halla en la arena, aquel cuyo rostro está manchado de polvo, sudor y sangre, el que lucha con valentía, el que se equivoca y falla el golpe una y otra vez, porque no hay esfuerzo sin error y sin limitaciones. El que cuenta es el que de hecho lucha por llevar a cabo las acciones, el que conoce los grandes entusiasmos, las grandes devociones, el que agota sus fuerzas en defensa de una causa noble, el que, si tiene suerte, saborea el triunfo de los grandes logros, y si no la tiene y falla, fracasa al menos habiéndose atrevido al mayor riesgo, de modo que nunca ocupará el lugar reservado a esas almas frías y tímidas que ignoran tanto la victoria como la derrota.
Theodore Roosevelt 



SI POR UN INSTANTE
Si por un instante Dios se olvidara
de que soy una marioneta de trapo
y me regalara un trozo de vida,
posiblemente no diría todo lo que pienso,
pero en definitiva pensaría todo lo que digo.  
 
Daría valor a las cosas, no por lo que valen,
sino por lo que significan.  
 
Dormiría poco, soñaría más,
entiendo que por cada minuto que  
cerramos los ojos,
perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen,
despertaría cuando los demás duermen.
Escucharía cuando los demás hablan
y cómo disfrutaría de un buen helado de chocolate!  
 
Si Dios me obsequiara un trozo de vida,
vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol,
dejando descubierto, no solamente mi cuerpo,
sino mi alma.  
 
Dios mío si yo tuviera un corazón,
escribiría mi odio sobre el hielo,
y esperaría a que saliera el sol.
Pintaría con un sueño de Van Gogh  
sobre las estrellas un poema de Benedetti,
y una canción de  Serrat sería
la serenata que les ofrecería a la luna.
Regaría con mis lágrimas  las rosas,
para sentir el dolor de sus espinas,
y el encarnado beso de sus pétalos...  
 
Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida...
No dejaría pasar un sólo día
sin decirle a la gente que quiero,
que la quiero.
Convencería a cada mujer u hombre
que son mis favoritos
y viviría enamorado del amor.  
 
A los hombres les probaría
cuán equivocados están al pensar
que dejan de enamorarse cuando envejecen,
sin saber que envejecen
cuando dejan de enamorarse!
A un  niño le daría alas,
pero le dejaría  que él solo
aprendiese a volar.
A los viejos les enseñaría
que la muerte no llega con la vejez,
sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes,  
los hombres...
He aprendido que  todo el mundo
quiere vivir en la cima de la montaña,
sin saber que la verdadera felicidad
está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido
aprieta con su pequeño puño,
por primera vez, el dedo de su padre,
lo tiene atrapado por siempre.  
 
He aprendido que un hombre
sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo,
cuando ha de ayudarle a levantarse.
Son tantas cosas las
que he podido aprender de ustedes,
pero realmente de mucho no habrán de servir,  
porque cuando me guarden dentro de esa maleta,
infelizmente me estaré muriendo.  
 
Siempre di lo que sientes y haz lo que piensas.
Si supiera que hoy fuera
la última vez que te voy a ver dormir,
te abrazaría fuertemente
y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.
Si supiera que ésta fuera
la última vez que te vea salir por la puerta,
te daría un abrazo, un beso
y te llamaría de nuevo para darte más.
Si supiera que ésta fuera la última vez
que voy a oír tu voz,
grabaría cada una de tus palabras
para poder oírlas una y otra vez indefinidamente.
Si supiera que estos son
los últimos minutos que te veo
diría te quiero y no asumiría,  
tontamente, que ya lo sabes.  
 
Siempre hay un mañana
y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien,
pero por si me equivoco
y hoy es todo lo que nos queda,
me gustaría decirte cuánto te quiero,
que nunca te olvidaré.  
 
El mañana no le está asegurado a nadie, joven o viejo.
Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas.
Por eso no esperes más,
hazlo hoy,
ya que si el mañana nunca llega,
seguramente lamentarás el día
que no tomaste tiempo para una sonrisa,
un abrazo, un beso y que estuviste muy ocupado
para concederles un último deseo.
Mantén a los que amas cerca de ti,  
diles al oído lo mucho que los necesitas,
quiérelos y trátalos bien,
toma tiempo para decirles lo siento,
perdóname, por favor, gracias
y todas las palabras de amor que conoces.

Nadie te recordará por tus pensamientos secretos.
Pide al Señor la fuerza
y sabiduría para expresarlos.
Demuestra a tus amigos cuanto te importan.
GABRIEL GARCIA MARQUE



SI
Si puedes conservar tu cabeza, cuando a tu alrededor
todos la pierden y te cubren de reproches;
Si puedes tener fe en ti mismo, cuando duden de ti
los demás hombres y ser indulgente para su duda;
Si puedes esperar, y no sentirte cansado con la espera;
Si puedes, siendo blanco de falsedades, no caer en la mentira;
y si eres odiado, no devolver el odio, sin que te creas,
por eso, ni demasiado bueno, ni demasiado cuerdo; Si puedes soñar sin que los sueños imperiosamente te dominen
Si puedes pensar, sin que los pensamientos sean tu objeto único,
Si puedes encararte con el triunfo y el desastre, y tratar
de la misma manera a esos dos impostores;
Si puedes aguantar que la verdad por ti expuesta
la veas retorcida por los pícaros,
para convertirla en lazo de los tontos.
O contemplar que las cosas a que diste vida
se han deshecho, y agacharte y construirlas de nuevo
aunque sea con gastados instrumentos. Si eres capaz de juntar, en un solo haz, todos tus triunfos
y arriesgarlos, a cara o cruz, en una sola vuelta
y si perdieras, empezar otra vez como cuando empezaste
y nunca más exhalar una palabra sobre la pérdida sufrida.
Si puedes obligar a tu corazón, a tus fibras y a tus nervios,
a que te obedezcan aún después de haber desfallecido
y que así se mantengan, hasta que en ti no haya otra cosa
que la voluntad gritando: ¡persistir, es la orden! Si puedes hablar con multitudes y conservar tu virtud,
o alternar con reyes y no perder tus comunes rasgos.
Si nada, ni enemigos, ni amantes amigos
pueden causarte daño;
Si todos los hombres pueden contar contigo,
pero ninguno demasiado;
Si eres capaz de llenar el inexorable minuto
con el valor de los sesenta segundos
de la distancia final,
Tuya será la tierra y cuanto ella contenga. Y -lo que vale más-, serás un hombre
¡hijo mío!.
Rudyard Kipling



DENTRO DE TI ESTÁ EL SECRETO

Busca dentro de ti la solución de todos los problemas,
hasta de aquellos que creas más exteriores y materiales.

Dentro de ti está siempre el secreto; dentro de ti están
todos los secretos.

Aun para abrirte camino en la selva virgen,
aun para levantar un muro, aun para tender un puente,
has de buscar antes, en ti, el secreto.

Dentro de ti hay tendidos ya todos los puentes.
Están cortadas dentro de ti las malezas y lianas que
cierran los caminos.

Todas las arquitecturas están ya levantadas dentro de ti.
Pregunta al arquitecto escondido: él te dará sus fórmulas.

Antes de ir a buscar el hacha de más filo, la piqueta más
dura, la pala más resistente, entra en tu interior y pregunta...

Y sabrás lo esencial de todos los problemas,
y se te enseñará la mejor de todas las fórmulas,
y se te dará la más sólida de las herramientas.

Y acertarás constantemente,
pues que dentro de ti
llevas la luz misteriosa de todos los secretos.
AMADO NERVO